Entrevista a Chechu 2007

Cecilia Bonelli: "Dejo fluir mi simpatía"

Finalista del certamen "Super M", la modelo de 21 años es la columnista deportiva de "Fuera de foco", con el desenfado y la inocencia como aliados. De chica iba al arco, de grande hace jueguitos en cámara.

CHECHU Así la llaman a Bonelli en la intimidad. Nieta de sicilianos, nació en San Nicolás, se crió en el campo y tuvo sueños de abogada.

Cuatro veranos atrás, Cecilia Bonelli dirimía en su San Nicolás natal dos caminos posibles: la Abogacía o el modelaje. Tenía 17 años, la certeza de querer convertirse en universitaria, pero el presentimiento de que su apariencia de porcelana podría depararle un porvenir menos sacrificado y más apacible que el de los código y las leyes. Así, impulsada por un reality producido por Cuatro Cabezas (Super M) que buscaba a una nueva modelo top mientras decenas de adolescentes convivían encerradas entre exigencias estéticas, "Chechu" fue una de las 3.500 inscriptas y no desentonó.

Elegida como una de las cinco finalistas del certamen, no tuvo la dicha de calzarse la corona de princesa, pero cosechó un fruto jugoso: un contrato con Ricardo Piñeiro, viajes laborales a Nueva York, México y otros cuantos puntos y hasta un debut en lo que luego sería su lugar: la conducción. "Fue loquísimo. Nunca había hecho tele y de un día para el otro me llamaron de Much Music y me fui a entrevistar a Thalia a los Estados Unidos para una emisión especial", cuenta con un tono aniñado la columnista deportiva de Fuera de foco (América), morocha de 21 años, que a los 17 cambió el nido familiar y los partidos de fútbol femenino que ella misma organizaba en su ciudad, por las luces de la ciudad y de los flashes. "Todavía juego algunos fines de semana, aunque despacio para no lastimarme. Veo una pelota y no puedo contenerme. Hasta en el estudio de TV hago jueguito. Crecí en el campo y cuando mis tres hermanos armaban picados me mandaban al arco", se ríe.

Nieta de sicilianos, alumna "casi 10" ("tuve un promedio de 9.45 durante el secundario"), Bonelli dice que hay un sello que se mantiene inalterable desde su infancia: sus hábitos de habladora compulsiva, rasgo que impresionó a varios productores. "Durante un desfile un productor me vio y me llevó a Fox para encarar un segmento de moda y de deporte en Lo mejor de Fox, junto a María Susini y Gustavo López. Enseguida llegó a A jugar América y me solté del todo. Y al tiempo me vio Gastón Portal y me convenció para participar en Fuera de foco. ¿Qué ven en mí? Cuando hago conducción dejo fluir mi simpatía, no hago un personaje, soy así de desinhibida en la vida", se vende.

Hoy en Fuera de foco, con una cuota de ingenuidad y hasta de inexperiencia, pero con la belleza como escudo, Bonelli carga al hombro la mochila del comentario deportivo y se vuelve inimputable. "Desde que me acerqué a este mundo me levanto y me devoro los diarios. Ahora Martín Ciccioli me toma examen todos los días como un profesor. Igual estoy formándome en el tema, estudio periodismo deportivo. Voy por el primer año recién porque pienso seguir trabajando como modelo hasta que el cuerpo lo permita", se sincera.

En su paso por el modelaje y los medios, Bonelli enamoró primero al mexicano Felipe Colombo (con quien salió un año) y luego al ex jugador de Boca Juniors Federico Insúa (hoy del Borussia Moenchengladbach de Alemania), a quien conoció en los estudios de Fox. "Fueron historias importantes, pero prefiero no hablar de eso. Hoy mi corazón también está contento".